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Birdwatching en Macaw Lodge

Texto: Hugo Santa Cruz

Regularmente es el primero en despertar, su canto nos incentiva a todos a ponernos de pie. Todavía es obscuro pero el Tinamú Grande (Great Tinamou) ya se encuentra cantando, mientras que un par de cientos de especies más comienzan a sacudir las alas, para próximamente entonar diferentes cantos – algunos muy sofisticados, destacándose del resto.

Mientras me voy alistando para la jornada, voy identificando y contando mentalmente los distintos sonidos que escucho – tratando de imitar algunos de ellos con poco éxito -, mientras me cepillo los dientes voy por las 13 especies identificadas y 2 o 3 sin poder reconocerlas.

El reconocimiento de aves por cantos y llamados es esencial para su conteo; algunos de estos cantos deleitarán los oídos más exigentes, así como un buen jazz; y otros no tanto… algunos quizás hasta llegues a odiarlos… tal cual es el caso de muchos por acá… con los incansables, insistentes e infinitos llamados del Mochuelo Común (Ferruginous Pygmy-Owl).

Sentirás que sigue tus pasos día a día, noche a noche; por donde te desplaces o por donde pretendas dormir… ¡¡¡Ah!!!, pero nunca lo verás, porque el pequeño mochuelo lo que mejor hace es esconderse, y a 20m en lo alto de los árboles, con sus escasos 15 cm; no tendrá problemas en ser invisible ante tus humanos ojos, pero sabrás que está ahí, porque lo escucharás hasta en tus sueños…

Si tienes la “suerte” de conocer al pequeño mochuelo cuando anda en búsqueda de novia, entenderás a lo que me refiero… y es que todas las personas por acá tienen su historia con el “Maja-Fierro” – nombre local del mochuelo, debido a su estridente y constante monótono silbido -.

Me dirijo hacia el área social principal del lodge, salgo de mi cabaña y a los pocos metros observo una Nutria (Neotropical Other) atravesar apresuradamente el sendero e internarse en el bosque – una de las 14 especies de mamíferos registrados en el lodge en poco más de 2 meses -.

A lo lejos puedo divisar a un grupo de entusiastas ingleses e estadounidenses, dirigiendo su mirada en todas direcciones, con ayuda de sus binoculares y teleobjetivos.

Una vez en el punto de encuentro, saludo al grupo y la respuesta son una serie de preguntas por las especies a nuestro alrededor: ¿qué especie es aquella?, ¿de quién es ese canto?, ¿si en esta zona hay tal especie?, etc.; pacientemente respondo a cada uno, pero con la mirada concentrada en la búsqueda de nuevas especies, mientras voy señalando todo lo que tenemos a nuestro alrededor.

Son apenas las 05:50 hrs. y nuestro registro ya se acerca a las 20 especies. Los agresivos y territoriales Colibríes Rabirrufo (Rufous-tailed Hummingbird) estarán entre los primeros en hacer notar su presencia, dominantes en el lado sur de las pequeñas y numerosas flores de color purpura – Verbenaceas – al lado del comedor, el cual tiene una estupenda vista de la laguna principal y de los jardines del lodge.

A pesar de su agresivo carácter los colibríes de esta especie comparten el néctar de su reinado, con los Colibríes de Corona de Berilo (Charming Hummingbird – especie endémica regional -), las flores son abundantes y tolerarán su presencia siempre y cuando respeten su lado del matorral. Por unos instantes una Coqueta Crestiblanca (White-crested Coquette) logra arrimarse a las verbenaceas, pero pocos segundos después es expulsada por el alfa de los rabirrufos.

En la misma mata no solo encontramos a los interesados en el néctar, algunos Espigueros Variables (Variable Seedeater), Tangaras Costarricenses (Scarlet-rumped Tanager – especie endémica regional -), Espatulillas Comunes (Common Tody-Flycatcher) y otros; interactúan y se alimentan al interior del arbusto. Y aún más cerca nuestro, se desplaza la Reinita Mielera (Bananaquit), perforando las flores tubulosas por la base, del arbusto que se encuentra junto al balcón; robando el néctar de las flores, sin siquiera polinizarlas.

Continuamos dirigiendo nuestras miradas para todos lados y advertimos el paso apresurado de los Rascones Cuelligris (Gray-cowled Woodrail), muy cerca pasan con más calma un par de Reinitas Acuática Piquigrande (Northern Waterthrush) y otras Reinitas Guardaribera (Buff-rumped Warbler).

Un agradable aroma nos indica que el café está servido, la fragante tentación es grande, pero no lo suficiente como para quitarnos la concentración en la búsqueda de nuevas especies.

No solo los seres alados se muestran en esta pacífica y a la vez ajetreada mañana. Las iguanas (Green Iguana) y los basiliscos (Common basilisc) se apoderan de las ramas más altas de algunos árboles, y con los ojos cerrados – como si estuviesen meditando -; toman los rayos del sol, permitiendo calentar sus cuerpos, recibiendo la energía que requieren para activar su torrente sanguíneo.

Los diferentes cuerpos de agua frente a nosotros, nos permiten observar varias especies de aves acuáticas como la Jacana Centroamericana (Northern Jacana), algunas garzas (Green Heron, Bare-throated Tiger-Heron), el inusual Ibis Verde (Green Ibis – raramente reportado en el lado del pacífico costarricense), martines pescadores (Ringed Kingfisher y Green Kingfisher), algunos playeros (Spotted Sandpiper y Lesser Yellowlegs) e incluso a la tímida Polluela Gargantiblanca (White-throated Crake), quien nos permite avistarla aunque sea por un par de segundos.

El espectáculo natural visual y sonoro que nos complace, va acompañado de la apreciación del colorido jardín botánico alrededor nuestro. La gran mayoría de las especies botánicas del jardín, fueron plantadas desde hace ya algunas décadas; cada una de ellas pensadas bajo delicados criterios de paisajismo y funcionalidad ecológica.

Una serie de árboles y arbustos, nativos y exóticos; conforman un jardín funcional repleto de vida, donde interaccionan especies animales y vegetales, en un espacio con una muy elevada densidad biológica.

Son las 06:20 hrs. y ya tenemos alrededor de 30 especies en nuestra lista. Es hora de desplazarse por los jardines y observar más de cerca algunas especies repetidas y descubrir otras nuevas. Iniciando el sendero comienzan a saludarnos las aves territoriales que jamás descuidan sus dominios, alrededor de la laguna en varias perchas observamos los distintos “pecho amarillos” – al menos unas 6 especies de atrapamoscas, todas ellas con el pecho del mencionado color – .

En lo alto del tejado principal se observa un ave monocroma sin mucha gracia… que no llama la atención de nadie, hasta que comienza a vocalizar algunos de sus variados cantos. No podemos evitar sonreír mientras nos deleitamos con el canto del Tordo Cantor (Melodious Blackbird).

A los pocos metros avistamos una Erythrina (Tiger Claw) repleta de flores llenas de néctar donde llegan a libar nuevas especies de colibríes para nuestra lista (Long-billed Hermit y Long-billed Starthroat), no son los únicos tras esas preciadas flores; una ardilla (Variegated Squirrel) también se alimenta de las mismas. Pocos segundos después llega el Momoto Coroniazul (Lesson’s Motmot) presumiendo su colorido plumaje y su extraña y alargada cola; la ráfaga de fotografías es inevitable…

Tras la conmoción del momoto, proseguimos pasando muy cerca de la plataforma de yoga y observamos a algunas personas saludando al sol. Pareciese que no son los únicos que saludan al astro, a los pocos metros un Gavilán Aludo (Broad-winged Hawk), posado con las alas abiertas, recibe también la energía de los rayos del amanecer.

Intento apresurar al grupo para llegar a una zona de interés con varias especies de árboles atractivos para las aves. Las todavía floreadas guabas (Inga sp.) nos muestran al Jacobino Nuquiblanco (White-necked Jacobin) y al Colibrí Pechiescamado (Scaly-breasted Hummingbird), los guarumos (Cecropia sp.) nos enseñan varias especies de tangaras y mieleros – alrededor de unas 5 spp. de tangaras y 3 spp. de mieleros (Tanagers y Hoonecreepers) -; y lo que más esperaba… las Scheefleras sp., nos muestran a 3 Tucancillos Piquianaranjado (Collared Aracari) y también a algunos entrometidos y comunes Tucanes Pico Castaño (Yellow-throated Toucan). Los almendros aún no muestran actividad de Lapas Rojas (Ara Macaw).

Parados por más de media hora en esta sección del jardín, actualizo el checklist y veo que ya superamos las 40 especies. Cuando al fin decidimos proseguir con el desplazamiento, dos parejas de Lapas Rojas, aterrizan en los almendros cerca de nosotros y comienzan a desayunar. Era de esperarse, las lapas no son las mejores madrugadoras.

Las ráfagas no se dejan esperar y mientras todos disparan concentrados a las emblemáticas lapas, detecto una pareja de Carpinteros Nuquidorado (Golden-naped Woodpecker) aterrizando justo al lado nuestro en un guarumo seco. Me cuesta llamar la atención de los observadores, quienes levemente desvían sus miradas de las lapas.

Es hora de continuar, llevamos más de 90 minutos y apenar recorrimos 200 metros. Seguimos con dirección al jardín de las palmeras – este jardín está compuesto por más de 20 especies de palmeras, la mayor parte de ellas exóticas -, descubrimos una hoja de Licuala sp. con 16 murciélagos (Common Tent-making Bats), proseguimos sin perturbar el sueño de los quirópteros. Más allá, observamos unas huidizas Chachalacas Cabecigris (Gray-headed Chachalacas) alimentándose de los frutos de otras palmeras.

Reanudando nuestra caminata, enseño un termitero con una cavidad circular en lo alto de un árbol, una pareja de Trogones Coliplomizo (Slaty-tailed Trogon) rondan el mismo – lo que nos indica que es un nido en proceso de construcción -, proseguimos evitando nuestra presencia prolongada en el sensible sitio, para no interrumpir el trabajo de estos futuros padres – así lo esperemos -. Los trogones con frecuencia hacen sus nidos en termiteros e incluso avisperos, su débil y frágil pico no les permite perforar cavidades en los troncos, por lo que el suave material de un termitero abandonado podría ser su mejor opción para anidar.

Ingresamos a uno de los senderos con bosque de mayor altura y encontramos varias especies de reinitas, atrapamoscas, carpinteros y hasta un par de tityras (warblers, flycatchers, woodpeckers y tityras); una hembra de Saltarín Cuellinaranja (Orange-collared Manakin) se posa muy cerca nuestro y todos solo pensamos en que su colorida pareja también llegue pronto… desafortunadamente no sucede.

Llegamos a la plantación de cacao. 10 ha de una plantación agroforestal, nos permite seguir deleitándonos con más y más especies de aves; entre ellas algunas rapaces, bucos, semilleros, soterreyes (birds of prey, puffbirds, seedeaters y wrens).

Macaw Lodge produce cacao de alta calidad, proveniente de un bosque agroforestal combinado con ingas, tecas, almendros, diferentes palmeras y arbustos, y muchos otros; los cuales permiten la interacción de más de 80 especies de aves y algunos mamíferos, reptiles y anfibios.

Posteriormente pasamos al lado del huerto con los frutos y vegetales producidos para el hotel, pero no solo los huéspedes humanos aprovechan estos; varios residentes alados también se benefician de las papayas, fresas, carambolas, pitangas, flores de katuk; solo por mencionar algunos.

Una observación estacionaria es tentadora; pero un extraño ruido proveniente de nuestros estómagos, nos recuerda que es hora de desayunar; el tradicional pinto costarricense, acompañado de frutos y otros productos producidos en el Santuario Macaw nos esperan.

Tenemos 60 especies de aves registradas antes del desayuno, la pajareada apenas comienza…